15 de julio de

1616. Durante este día, al anterior y el siguiente, tienen lugar los encarnizados combates de Cabo Caledonia, que una escuadra de seis galeones perteneciente al Duque de Osuna y mandada por D. Francisco de Rivera, sostiene con una escuadra otomana de 55 galeras. A pesar de la desigualdad numérica, la pericia del de Rivera, impidiendo le envolvieses, la valentía y el buen empleo de la artillería, dan por consecuencia la derrota de los turcos. Esa victoria cristiana es reputada como la más brillante de estos tiempos, después de la Batalla de Lepanto.